Mis sinceras felicitaciones a DIARIO DE BURGOS y a ese ramillete de columnistas, de entre los que quiero hacer mención especial a LUIS ANGEL DE LA VIUDA, con quien de forma esporádica colaboré en su sección Burgos de memoria. A TINO BARRIUSO, siempre atento al devenir burgalés. A mi querido profesor y vicerrector de la UBU RENÉ J. PAYO, que, en su preocupación por el arte burgalés ha insistido seriamente sobre este triste estado de nuestro paseo. A mi queridísima y admirada (también profesora) Mª JESÚS JABATO, que, tanto en algunos de sus libros como en sus múltiples columnas, derrocha delicadeza y ternura en favor de la que fue nuestra entrañable casa de todos. Mª Jesús, si me lees, olvida tu deliciosa vena poética, y ¡dale caña dura a este tema!. A PILAR CANALES, la (dicho en el mejor sentido del término) okupa entrañable de ese maravilloso recinto urbano burgalés. Y a todos los colaboradores que en algún momento se han ocupado de lo que es y de lo que fue EL ESPOLÓN.
Y una petición a cuantos se dignen leer este comentario: Entre todos ¡¡¡SALVEMOS EL ESPOLÓN!!! Acompaño enlaces facilitados por DIARIO DE BURGOS para que todos nos sumemos a su manifiesto, pues es por algo nuestro.